Lorenzo Sancho Fernández
En esta ocasión, me aparto de los temas de actualidad política y legislativa centrados en México para analizar el papel que, desde hace años —incluso décadas—, la Unión Europea (UE) ha desempeñado en la escena internacional. Conformada por 27 países y más de 448 millones de habitantes (5,6 % de la población mundial), la UE cuenta con una moneda común y un mercado integrado cuyo PIB asciende a 17 billones de euros. Además, es el mayor exportador mundial de productos manufacturados y servicios, representando aproximadamente el 14 % del comercio global de mercancías. A pesar de estos datos, su influencia en el ámbito internacional ha disminuido progresivamente hasta quedar, en muchos casos, relegada al papel de mera espectadora en una contienda que otros protagonizan. Mientras Estados Unidos y China disputan la hegemonía global, Rusia busca consolidarse como potencia y países como India experimentan un crecimiento acelerado, la UE parece haber perdido relevancia. Su ausencia en las recientes negociaciones de paz en Ucrania es un claro ejemplo de ello. Ni los Estados miembros ni la Unión en su conjunto fueron invitados a la mesa de diálogo, a pesar de que el conflicto ocurre en sus propias fronteras. Paradójicamente, tampoco se contó con la participación del país invadido, Ucrania, que ha quedado reducido a un mero observador mientras otros deciden sobre su territorio y sus recursos naturales. Lejos quedaron los tiempos de líderes como Helmut Kohl, François Mitterrand o Konrad Adenauer. La última figura de peso en la UE fue Angela Merkel, cuyo liderazgo concluyó en 2021. Desde entonces, el vacío de liderazgo ha agravado aún más la pérdida de influencia del bloque en la esfera internacional. Además de esta carencia de liderazgo, la UE enfrenta una crisis interna, evidenciada en el creciente euroescepticismo dentro de sus propios Estados miembros. El caso más representativo es el Brexit, que marcó la salida del Reino Unido y puso en evidencia el desencanto de ciertos sectores con el proyecto europeo. Desde mi perspectiva, la falta de liderazgo y la crisis institucional de la Unión son las que han llevado a esta situación. Dos problemas que no resultan fáciles de resolver (especialmente el primero por la falta de perfiles en la actualidad) pero que es preciso abordar para remontar y volver a ser acreedora de la posición que le corresponde en la esfera internacional. La ausencia de perfiles de liderazgo parece ser un problema del que adolece la política mundial actual pero, como propuesta para mejorar la crisis institucional se podría plantear precisamente reforzar a las instituciones y una mayor concienciación a los ciudadanos europeos sobre los valores y las enormes ventajas que ofrece la Unión. Aun tratándose de un actor que no se encuentra en la primera línea de acción en la escena internacional, no debe perdérsele de vista, menos en un momento de incertidumbre generada por las políticas arancelarias de Estados Unidos hacia el resto del mundo. Me atrevería a plantear, desde el máximo respeto y sin querer opinar o inmiscuirme en asuntos ajenos, que ésta podría ser una gran oportunidad para que países como México o Canadá giren hacia la Unión Europea para buscar nuevas alianzas o reforzar las ya existentes. Ojalá esta nueva reconfiguración que parece estar produciéndose con el regreso al poder de Donald Trump se convierta en el albazo necesario para que la UE regrese a ocupar la posición de relevancia a nivel internacional que le corresponde. |
Proporcionamos información de valor, de manera sencilla, entendible y accionable para generar una ventaja competitiva.
El Plan Nacional de Desarrollo (PND) es el documento rector donde se establecen los objetivos, estrategias y prioridades del Gobierno de México para un periodo sexenal. El actual PND 2025-2030, presentado por la presidenta Claudia Sheinbaum, busca consolidar la transformación del país mediante un modelo de desarrollo centrado en el bienestar, la sustentabilidad y la justicia social. Este plan se articula en cuatro ejes fundamentales: gobernanza con justicia y participación ciudadana;...
Vivimos una paradoja hídrica, aunque existe una aparente abundancia de agua, el acceso a este es limitado. Cerca el 70 % de la superficie terrestre está cubierta de agua, sin embargo, cada vez enfrentamos mayores dificultades para acceder a ella. Lejos de ser un recurso inagotable, se ha convertido en un bien estratégico. Su importancia va más allá de lo fisiológico, afecta la estabilidad política, económica, ambiental e industrial de las naciones. A medida que su disponibilidad disminuye, su...
En lo que va del segundo mandato de Donald Trump, se han ido despejando las dudas sobre su manera de actuar. Lo que antes podía considerarse una forma pragmática de ejercer el poder, ahora puede entenderse como una ideología en sí misma. Trump ha mostrado una mayor disposición a ignorar o reinterpretar acuerdos multilaterales cuando no se alinean con sus objetivos e ideas inmediatas de lo que deben ser los Estados Unidos como potencia mundial. La lógica que guía sus decisiones no responde a...